El Arsenal sigue vivo en la lucha por la Premier después de complicarse un partido con la expulsión de Xhaka en la segunda parte y el penalti de Coquelin en el descuento.
Mustafi había adelantado a los de Wenger con su primer gol como 'gunner', pero Gray aprovechó el regalo de Coquelin desde los once metros para poner de los nervios al Emirates.
Wenger acabó expulsado y el Arsenal se aferró a la épica. Balón colgado al área y penalti sobre Koscielny, que se jugó la cabeza ante un defensor que perdió la suya en el momento clave del encuentro.
El partido estaba muerto y el penalti lo mandó a la reanimación. Allí apareció Alexis Sánchez para infartar al estadio con un 'Panenkazo' marca de la casa que dejó los tres puntos en Londres.
Con este triunfo, el Arsenal se convierte en el único perseguidor del Chelsea tras los tropiezos de todos sus rivales directos en la jornada de ayer. El Burnley, que rozó la épica, se marchó de vacío, pero con la tranquilidad de tener un buen colchón a sus espaldas.