Flamengo ya está entre los cuatro mejores equipos de Sudamérica. El 'Mengao' dejó en la cuneta a Internacional, que coqueteó incluso con la posibilidad de igualar la eliminatoria.
Los de Jorge Jesus supieron sufrir para sacar un botín como es meterse en las semifinales de la Copa Libertadores. Ya conocen a su rival, un viejo conocido, Gremio de Porto Alegre.
Pero, ¿cómo se gestó el pase? Tras el 2-0 a favor de la ida, el 'Fla' fue con todo al Beira-Rio para dejar la eliminatoria sentenciada lo más pronto posible. Dicho y hecho.
El partido arrancó con fuerza, ya que en apenas dos minutos pudo haberse adelantado el cuadro visitante. Bruno Henrique y Gabigol tuvieron dos buenas oportunidades que no materializaron.
Poco a poco, el choque se igualó en intensidad hasta que Flamengo volvió a hacerse con el control del encuentro. Justo antes del descanso, Gabigol volvió a contar con otra ocasión y también la erró. Remató demasiado cruzado ante Lomba y se echó las manos a la cabeza.
Tras la reanudación, el guion de partido no cambió hasta que por fin llegó un gol. Lo hizo Internacional a balón parado: D'Alessandro colgó el balón y Lindoso ejecutó un gran cabezazo para darle esperanzas a su equipo. El árbitro, a instancias de la sala del VAR, tuvo que revisar la acción en la pantalla por si había fuera de juego. Finalmente, el colegiado lo validó.
Los nervios se apoderaron de los jugadores de Flamengo, que echaron el cerrojo atrás mientras su rival lo arrinconaba en su área. Conforme pasaron los minutos, los locales mandaron hombres hacia arriba para intentar igualar la eliminatoria y eso acabó condenándoles.
En el 85', los de Jorge Jesus montaron una contra letal que terminó por empatar el encuentro. Bruno Henrique se lo guisó y Gabigol mandó el esférico al fondo de las mallas con todas las de la ley. 1-1 en el choque y 1-3 en la serie.
Jarro de agua fría para la parroquia del 'Colorado', que lo siguió intentando tras el añadido de ocho minutos sin éxito alguno. Flamengo ya espera a Gremio por un puesto en la final.