Raúl García ha visto como ha ido perdiendo minutos de juego paulatinamente. Y los refuerzos llegados, en forma de fichaje o vuelta de cesión, no invitan a la esperanza. Es por eso que desde Bilbao se ha preguntado por su situación, si bien no se ha puesto en marcha negociación alguna.
El navarro es uno de los pilares del equipo y tercer capitán del mismo, y el club ni se plantea la posibilidad de desprenderse de él. Sólo se lo pensarían si fuese el propio jugador quien lo pidiera completamente convencido de abandonar el equipo.