Los jugadores del conjunto brasileño se disponían a volver tras disputar el encuentro, momento en el que un grupo de aficionados del conjunto local aprovecharon para lanzar piedras y botellas al vehículo.
El autobús quedó muy dañado y los futbolistas, afortunadamente, no resultaron heridos. A pesar de haber ganado el partido, los hinchas de Atlético Mineiro protagonizaron este episodio violento.
En lo deportivo, Sao Paulo perdió por 1-0 en el Raimundo Sampaio. El gol del defensa Fábio Santos inclinó la balanza hacia el lado local, que se acabó llevando los tres puntos.