Y es que, los jugadores menos habituales, aquellos actores secundarios que complementan el potencial del once de lujo, no han estado a la altura de las circustancias de un equipo que debía haber luchado por todo hasta el final. Su productividad ha sido bastante negativa, sobre todo, teniendo en cuenta el gran papel que han desempeñado los suplentes de Zidane.
Comparando los equipos 'B' de ambos conjuntos, el Real Madrid gana por goleada ante los de Luis Enrique. Tanto es así que los suplentes blancos han anotado un total de 62 de los 154 tantos del equipo (un 40% de los goles), mientras que los menos habituales del Barça sólo han firmado 38 de sus 156 dianas (24,3%), casi la mitad.
La comparación pierde sentido aún más a la hora de mirar la participación en goles de ambos frentes. El segundo equipo 'merengue' ha participado en 111 goles (72% de los tantos de su equipo), mientras que los 'culés', tan sólo en el 44,8% (70). Así que, si el Barça quiere dejar de lado esta desiguladad tiene que comenzar por el banquillo.