Los octavos de la máxima competición continental exigían concentración e intensidad desde el minuto 1. El Barcelona cumplió con esas demandas, y firmó muchas más...
Desde el primer instante, las jugadoras de Lluís Cortés supieron a la perfección lo que tenían que hacer. En el primer tiempo les bastó con la velocidad por banda y presión en el área rival.
El Minsk dejó muchas dudas defensivas en unas fases de encuentro que el Barcelona aprovechó para tomar ventaja en el electrónico. Oshoala sería quien abriría el electrónico.
Asistencia fenomenal de Hansen desde la derecha y remate de la nuevamente goleadora delantera nigeriana, que está de dulce. El Barcelona no bajó el ritmo, sino que lo elevó.
Cumplido el minuto 20, un centro de nuevo de Hansen desde la esquina fue cabeceado de forma muy potente por Torrejón. Sonreía la afición en el Johan Cruyff.
Y es que, a los 26 minutos de encuentro, el partido ya iba 4-0 gracias al doblete a continuación de Aitana Bonmatí, quien aprovechó sendos envíos fenomenales de Oshoala y Leila.
El primer tiempo fue un monólogo fabuloso del equipo 'culé'. El Minsk, que echó al Zürich de los dieciseisavos, no pudo prevenir los golpes que se fue llevando a lo largo del encuentro.
Finalmente, la gran Jenni Hermoso, que entró con hambre y ganas al final del partido, cerró una goleada que pudo ser mayor. Un 5-0 que tranquiliza y hace temer a los rivales por Europa.