Y es que pesó demasiado el 1-4 del encuentro de ida en Santander, sin que ni siquiera el Barça B tuviera que esforzarse en su casa para poder llevarse el ascenso. Un contundente marcador como ese fue suficiente para que el filial 'culé' conquistara la final aun con el 0-0 en el marcador.
Ambos conjuntos tuvieron ocasiones para alterar la igualdad en el luminoso, pero la fortuna y las buenas acciones defensivas evitaron que en el Mini Estadi se celebrara gol alguno.
A falta de diez minutos para el final, el 'templito' azulgrana se convirtió en una fiesta, mientras las ilusiones del Racing se agotaban en cada balón perdido tras el fondo de la portería rival.
El resultado de aquel 18 de junio señaló el camino del Barcelona B, que celebró el ascenso a la Categoría de Plata tras el pitido final de unos 90 minutos de puro trámite.
El Barcelona B ya es de Segunda.