El Barça tomó una decisión que escondería otra de mayor calado. Dentro de la destitución del ojeador André Cury, que no es oficial pero sí desveló 'TV3', podría esconderse la resignación de dar por perdido a Neymar. Y es que el brasileño era uno de los perfiles clave para volver a acometer su incorporación.
Cuando el delantero brasileño fichó por el Barcelona en 2013, el intermediario resultó una figura vital para que la operación llegara a buen puerto. Y tan capital fue, que el paado verano Josep Maria Bartomeu volvió a encomendarse a sus manos, y a las de Pini Zahavi, para liderar el retorno del atacante.
Finalmente, las negociaiones con el PSG no cuajaron, pero por la falta de acuerdo con los franceses, no por problemas con el jugador.
Así que esta decisión de prescindir de Cury podría ser la consecuencia de haber tirado la toalla por Neymar, toda vez que la negociación se mueve en cifras prohibitivas dada la actua crisis económica por la pandemia.
"La Junta Directiva ha aprobado la reestructuración del departamento de scouting del área de fútbol, fruto del análisis iniciado en el mes de enero, con el objetivo de mejorar su eficiencia. Con esta medida, el club pretende reforzar un departamento estratégico para la planificación y el buen funcionamiento del área deportiva más importante de la entidad, en todos sus niveles, desde las categorías de formación hasta el primer equipo", se limitó a decir en su nota el Barça. 'TV3' fue más allá.
El medio catalán habla de criba, pues irían fuera entre 20 y 25 de los 40 trabajadores que tiene el club azulgrana en dicho departamento.
Cury, además e su exitosa intervención en el fichaje de Neymar, también tiene algún muerto a cuestas, puesto que recomendó al Barça el fichaje de Henrique y Keirrison, dos tipos que supusieron el desembolso de 22 millones y que ni siquiera llegaron a vestir la elástica del equipo.
Eso sí, en su haber queda la apuesta por Arthur y la recomendación de la incorporación de Paulinho.