Y es que, pese a que el futbolista aún pertenece al Everton (club que le tiene cedido al cojunto transalpino), su contrato lleva implícita una opción de compra prioritaria, por lo que su compra es una posibilidad bastante seria.
No obstante, el Barça no quiere dar un paso en falso para arriesgarse y considera que, antes de ficharle, lo mejor será seguirle de cerca. Y así lo está haciendo.
El jugador ya habría sido vigilado por emisarios 'culés' en varios partidos, según asegura 'AS', pero el mismo diario informa de que, en el próximo choque liguero (ante el Palermo), habrá varios directivos del Barça mirándole bien de cerca... ¿les convencerá?