La división de los derechos económicos es una práctica muy habitual en el fútbol sudamericano, pero esta vez el Barcelona sólo negociará con Gremio, que gestiona el 80% de los de Arthur.
Así está establecido desde que el futbolista firmase su nuevo contrato en octubre. El resto de porcentaje de los derechos económicos se divide entre Celso Rico (10%), que está alineado con el club gaucho, y el propio jugador (10%).
En la práctica, el equipo controla el 90%, ya que Celso Rico no interviene en la venta de futbolistas. Gremio le cedió el 10% como una fórmula para poder recuperar parte de las aportaciones financieras que realiza el club.
El contrato de Arthur con Gremio se extiende hasta 2021 y tiene una cláusula de 50 millones de euros, sin rebaja para ningún club. Y eso es precisamente lo que quiere el Barcelona, una rebaja, por lo que ya busca cómo obtenerla, según afirma 'Sport'.
El hecho de que Gremio controle el 90% tiene una ventaja y un inconveniente: los 'culés' sólo tienen que negociar a una banda, pero se reduce el margen para intentar rebajar el precio del fichaje. Y directivos del club brasileño han declarado en repetidas ocasiones que sólo venderán al jugador previo pago de los 50 'kilos'.
Es habitual que los clubes europeos pidan a los futbolistas que renuncien al porcentaje de sus derechos para después devolverle esa cantidad en ficha, dividiéndola a lo largo de los años contrato. El Barça tiene el 'sí' de Arthur, que hará todo lo posible para acabar vistiendo de azulgrana.
Por el momento, los 'culés' pueden respirar tranquilos: el Barcelona es el primero de la cola para hacerse con el futbolista, ya que ha logrado un acuerdo preferencial. Ahora, sólo queda decidir si se lanza a por el centrocampista en enero o aguarda al próximo y cómo conseguir la rebaja.