El todopoderoso Bayern de Múnich ha caído. Los de Hansi Flick se han vuelto a la tierra después de que el Hoffenhiem se impusiera por 4-1 en la resaca campeona de los bávaros.
Con este partido se ha puesto el punto final a una racha de 33 partidos sin conocer la derrota y, lo que es aún más impresionante, solo un empate en esa cuasi interminable racha.
El rodillo de Flick se encontró con una pierda demasiado grande que se metió por medio de sus engranajes y echó el telón.