El Benfica dominó la mayor parte del encuentro, pero la falta de efectividad del cuadro luso le pasó factura. El conjunto ruso planteó un choque serio y apretó en la segunda mitad.
La segunda parte comenzó con una buena noticia para el cuadro portugués. Seferovic puso por delante a los suyos en el minuto 51, aunque poco le iba a durar la alegría.
Tras este gol, el CSKA de Moscú despertó y asestó dos golpes casi seguidos al Benfica. Vitinho y Zhamaletdinov amargaron la noche de Champions a los de Rui Vitória.