Se repite el momento diez años después. Todo el mundo recuerda cómo el Bernabéu aplaudió a Ronaldinho. Esta vez, el merecedor de tal reconocimiento ha sido Iniesta, a pesar de haber puesto el tercero con un auténtico golazo, cuando se ha retirado del terreno de juego.
El manchego, que ha jugado su primer Clásico como capitán del Barça, ha correspondido el gesto del eterno rival y ha devuelto el aplauso.