El cambio de parecer en el club viene dado por el doblete de Rubén Castro en el Camp Nou y porque se pone de relieve, por séptimo año seguido, que los objetivos del Betis pasarán por la eficacia del atancate, lo que habría hecho que la directiva tome consciencia de la importancia de "tener contento al canario".
La golosa oferta económica, ya conocida en el conjunto andaluz, procedente de Catar, también ha ayudado.
Al Betis le echaban para atrás para la renovación los 35 años que ya tiene Rubén Castro, pero ya no le importa. Lo que sí preocpa en la casa verdiblanca es lo que pueda ocurrir con el futbolista en el juicio que tiene pendiente por maltrato y que tendrá lugar a mediados o finales de esta temporada. Pero para ello ya se están preparando cláusulas en el nuevo contrato.
Al jugador le gustaría que el Betis le renovase dos años más, pero el club tiene la intención, en principio, de ampliarle contrato hasta junio de 2018. El otro año extra dependerá de los partidos que el delantero juegue la próxima temporada.
En lo que sí hay acuerdo es en el hecho de que Rubén Castro cobre más desde este curso, sobre todo si logra marcar un buen número de tantos. El atacante espera firmar lo antes posible.