La ampliación de capital busca aumentar la capacidad en tesorería del Castellón por lo que el máximo accionista, José Miguel Garrido, sostiene que "el club no se endeuda, no es un préstamo", al tratarse de una inyección de capital.
El presupuesto para la presente campaña asciende a 2,76 millones de euros y la previsión apunta a un déficit de 809.000 euros a los que habría que sumar los 246.000 del último ejercicio.
Pese a ello, Garrido afirma que "la intención es que la deuda vaya desapareciendo", aunque "el 75 por ciento de los clubes de Segunda división B son deficitarios", por lo que el objetivo es mantener la categoría y lograr el ascenso en cuatro o cinco temporadas.
El presidente, Vicente Montesinos, ha señalado que desde su llegada en junio de 2017 han conseguido salvar al club, sanearlo y ascender, aunque ha resaltado como aspecto negativo la falta de apoyo institucional.