El Christiania Sport Club es un equipo diferente a los demás. Representa a la Ciudad Libre de Christiania, que tampoco es un lugar muy común desde que en 1970 un grupo de ocupas invadió un terreno militar abandonado y proclamó el paradigma del mundo libre.
Fue el 26 de septiembre de ese mismo año cuando unos padres hicieron algo muy sencillo: derribar uuna valla para permitir que sus hijos pudieran jugar en unos terrenos abandonados. Sin pretenderlo, iniciaron un movimiento hippie con el que levantaron teatros, colegios y guarderías.
Tras varias décadas de lucha con el gobierno danés, Dinamarca le concedió el permiso para permanecer allí y proclamar la Ciudad Libre de Christiania y convertirse en un barrio autogobernado por menos de 1.000 habitantes en el que se consideran independientes a Dinamarca y Europa.
Un barrio permisivo con las drogas, especialmente con la marihuana. Fue esta la que se convirtió en el símbolo del nuevo equipo de fútbol. De ahí su lema: 'You’ll Never Smoke Alone’.
Los jugadores consumen marihuana con asiduidad y sus secuelas han afectado al rendimiento del equipo: "Jugamos más relajados, sin nervios y somos libres para jugar sin ataduras. Antes veíamos muchas amarillas o sufríamos expulsiones, pero desde que comenzamos a jugar fumados estamos mucho más tranquilos y hemos empezado a ganar partidos", explicó Tjadl, uno de los mitos del equipo.
Por supuesto, las anécdotas están a la orden del día en el Christiania. "Cómo íbamos fumados a los partidos muchos nos olvidábamos de las calzas y nos prestaban otras. Comenzó como un error, pero lo acabamos convirtiendo en tradición", desveló Tjad entre risas.
¿Y cómo es jugar contra jugadores fumados? Lo explica Michel, entrenador del FC Sydhavnen: "Es muy difícil jugar contra ellos porque son imprevisibles. Van tan drogados que nunca sabes lo que pueden ser capaces de hacer".
Pero no sólo los jugadores fuman. Los aficionados acuden al estadio, con una capacidad de apenas 1.000 espectadores, para ver el encuentro al mismo tiempo que se fuman un cigarro de marihuana. El sueño del club es jugar algún día en la Tercera División Danesa, pero se conforman con jugar la Copa y divertir a sus aficionados con su espíritu libre.
Y es que en el Christiana llevan a rajatabla su lema: 'You'll never smoke alone'.