"Nápoles es acogedor, pero Higuaín no creo que tenga una calurosa bienvenida. Renzi (primer ministro) vino con detector de metales y 1.000 guardaespaldas rodeándolo. Como debe hacer Higuaín", expresó el alcade de Nápoles.
Di Magistris encabeza así el rencor de la escuadra italiana ante el delantero argetino, que decidió marcharse a uno de sus mayores rivales el pasado verano.
A pesar de que el choque se jugará en Turín, el esperado reencuentro ya se acoge con pasión en Nápoles. El partido de vuelta puede ser un infierno para el 'Pipita' Higuaín.