El sueño del Huesca transformó en pesadilla el debut liguero del Eibar frente a su público. Los aragoneses vivieron su estreno en la categoría ganando merecidamente a domicilio a los de Mendilibar.
Quizás pecó de exceso de confianza el equipo vasco, que se las veía felices para volver a comenzar la competición liguera sumando tres puntos. En la 2017-18 ganó por 0-1 en su visita a La Rosaleda con gol de Charles.
La falta de concentración, la carga física de los jugadores en la pretemporada o la mala fortuna en una acción clave de penalti, no pitado por Prieto Iglesias. Son varias las explicaciones que buscan en Ipurua para comprender un horrible comienzo.
Kike García y Sergi Enrich no fueron capaces de parar las salidas a la contra del Huesca, claves en el resultado del partido. Los centrocampistas, desbordados en los ataques del rival, tampoco tuvieron su mejor día.
Sea como fuere, José Luis Mendilibar tiene trabajo para lo que le viene por delante. Sólo es el primer partido y puede quedar en una anécdota, depende de saber sobreponerse y dar cabida a la autocrítica.