El Deportivo llegó al Anxo Carro en la enésima oportunidad de Luis César Sampedro para darle la vuelta a la situación del equipo. Después de 16 encuentros consecutivos sin ganar, los blanquiazules tampoco consiguieron hacerse con los tres puntos en el derbi gallego, aunque se notó la mejoría de los últimos compromisos.
A pesar del empate, el Lugo mantiene cuatro puntos de renta sobre la zona de descenso a la Segunda División B, aunque tiene por delante un difícil calendario que podría complicarle la vida en la lucha por la permanencia en LaLiga SmartBank.
El duelo comenzó con sufrimiento para los del técnico pontevedrés. Apenas lograron pasar la línea divisoria y, en el minuto 4, Dani Giménez tuvo que salvar los muebles con un disparo a bocajarro de Manu Barreiro. Tampoco acertó Cristian Herrera, que remató fuera al rechace con todo a favor.
Fruncía el ceño el técnico del bloque coruñés en la zona técnica ante la que se le venía encima. Los 'albivermellos' mantuvieron a raya a los jugadores visitantes durante los primeros minutos y generaron peligro cada vez que rondaron la portería rival.
No obstante, el ímpetu del Lugo se fue apagando con el paso de los minutos y Vicente Gómez asumió la batuta del juego. Se echó el equipo a la espalda y puso la directa hacia la meta de Ander Cantero.
El centrocampista grancanario se asoció con Víctor Mollejo, que neutralizó la mayoría de oportunidades que disfrutó el conjunto de Riazor. El futbolista de 18 años volvió a ser uno de los más activos, aunque no tuvo fortuna de cara al gol.
Los jugadores del Dépor se fueron quedando sin gasolina y los de Eloy Jiménez lo aprovecharon para volver a la carga. Yanis Rahmani y Manu Barreiro tuvieron el gol en sus botas, pero ninguno de los dos remates vio puerta.
El empate a cero campeó en el electrónico hasta el pitido final. Ambos combinados acusaron la falta de puntería y firmaron un armisticio que no contentó a ninguno de los dos combinados.