Este mes de enero se cumplen 20 años de una decisión histórica del Manchester United. Los 'red devils' acudieron a la edición experimental del Mundial de Clubes como ganadores del triplete la anterior temporada, pero las cosas no les pudieron ir peor. Además de tener que posponer varios choques de la Premier League, los de Old Trafford renunciaron a jugar en la FA Cup para acabar fracasando en Brasil. Una decisión controvertida y por la que sus aficionados aún se llevan las manos a la cabeza.
Muchas voces se levantaron en Inglaterra por la decisión del Manchester United de no participar en la competición más antigua de Inglaterra, aunque otros apoyaron a los 'red devils', ya que la propia Federación les había animado a participar en un Mundial que no cuajó, pero que fue el predecesor del actual torneo, que enfrenta a los campeones de las distintas confederaciones en diciembre.
La estancia de los de Ferguson en Brasil no fue tan exitosa como hubiera cabido esperar. El Necaxa fue superior en el debut en un choque en el que David Beckham vio la tarjeta roja por una entrada durísima sobre José Milián. Tras el gol inicial de Montecinos, Yorke empató a 4 minutos del final, salvando un punto para los 'red devils'. Antes, el ariete de Trinidad y Tobago había fallado un penalti.
El segundo encuentro del Manchester United fue aún más decepcionante. Los de Ferguson fueron derrotados por 1-3 por el Vasco da Gama de Romário y Edmundo y quedaron eliminados, imponiéndose en un intrascendente último partido al South Melbourne con dos tantos de Fortune. Este jueves se cumplen 20 años de la icónica derrota ante los brasileños, un partido en el que la dupla atacante, ya veterana, hizo lo que quiso con los británicos.
¿Mereció la pena renunciar a la FA Cup por una competición que hoy día todo el mundo considera como amistosa? Probablemente no y, por eso, cada mes de enero en las islas recuerdan una de las decisiones más incomprensibles de la historia del United.