A falta de 18 puntos por disputarse, los de Porto Alegre, terceros empatados con Palmeiras, cuarto, aún cuentan con opciones de asaltar el liderato. Ocho puntos de ventaja es un buen colchón, pero Corinthians ya ha demostrado que puede fallar en cualquier momento.
Además, Gremio aún debe sellar su billete a la Libertadores, ya que el peligro de abandonar la zona privilegiada está a siete puntos. Por estos dos motivos, la Liga Brasileña no pueden ser seis amistosos de aquí al final. Pero claro, llega la finalísima.
La Libertadores se disputará el 22 y 29 de noviembre. Tras el decisivo partido de vuelta, sólo faltará una jornada por disputarse en el Brasileirao, pero Renato quiere ahorrar algún que otro esfuerzo para sumarlo a la lucha con Lanús.
Los argentinos remontaron a todo un River Plate, por lo que Gremio ya sabe qué tipo de rival se encontrará y qué nivel puede llegar a dar. Una victoria, un título, a solo dos partidos de distancia. ¿Merece prioridad la Libertadores, esa que no levantan desde 1995?