El Mónaco no pudo defender el tanto de Sidibé y terminó cayendo ante el PSG en la lucha por el primer título de la temporada en Francia.
Los de Emery se alzaron con el primer trofeo en juego y lo hicieron en un partido discreto de la gran estrella del Mónaco Kylian Mbappé. El atacante, por el que se pagarán más de 150 millones de euros si es que finalmente abandona el Mónaco, apenas tuvo impacto en el partido.
No comenzó mal, pero se diluyó con el paso de los minutos y en la segunda mitad apenas entró en juego con el esférico. Tan discreto fue su rendimiento que incluso Jardim decidió sustituirle por Carrillo a 20 minutos del final.
Un mal síntoma de cara al futuro para el jovencísimo delantero, que quizás ha empezado a sentir la presión por hacer un buen partido día sí y día también. Tiene tiempo para asimilarlo y volver a demostrar que es la promesa más grande ahora mismo en el mundo del fútbol en Europa.