Miguel ha denunciado al Valladolid, y el Valladolid ha denunciado a Miguel. El canterano blanquivioleta se empecinó en abandonar el club el pasado verano, y el conjunto castellano considera que lo que hizo fue ilegal. Acabarán en los tribunales.
Todo comenzó con la marcha unilateral de Miguel al Leganés, en calidad de cedido, en virtud de una cláusula de su contrato que el Valladolid nunca reconoció. Se fue al Leganés, pero no se salió con la suya por completo.
Miguel y el Valladolid comenzaron una guerra por ello. Una batalla legal que a día de hoy no ha concluido. Miguel se aferra a una cláusula que le permitía irse cedido a otro club que le ofreciera un sueldo mayor, siempre y cuando no hubiera alcanzado un mínimo de encuentros.
Y ahí está el problema. El Valladolid dice que sí, que llegó al mínimo, y Miguel y sus agentes, todo lo contrario. Cruzaron denuncias, pero el Valladolid no despidió a Miguel. Y comenzó un largo proceso judicial que todavía no ha finalizado.