Cuando solamente tenía dos años, Juan Fernando Quintero afrontó el momento más duro de su vida: la desaparición de su padre.
Jaime Enrique Quintero Cano fue visto por última ocasión en marzo de 1995 mientras era trasladado para prestar el servicio militar en la Brigada XVII en Carepa. Nunca más se supo de él.
Esa tragedia marcó al jugador y a toda su familia, que estos días ha vivido momentos muy difíciles por una polémica relacionada con la desaparición.
Tal y como señala 'Goal', Eduardo Zapateiro Altamiranda ha sido nombrado comandante del Éjercito Nacional de Colombia. Algo que ha sido un mazazo para los Quintero.
Y es que la familia del jugador siempre ha mantenido que el militar estuvo altamente implicado en la pérdida del progenitor del futbolista.
"Uno no entiende por qué a las personas que cometen este delito de desaparición forzada los premian, esto ha sido muy doloroso para toda la familia y no entiendo porque lo ascienden", comunicó Carlos Quintero, tío del jugador de River Plate, en 'Caracol Radio'.
Por su lado, Silvia Quinetro, tía de 'Juanfer', dejó claro que el militar debe responder por la desaparición.
"Si él estuviera interesado ayudaría a saber qué pasó con mi hermano. Debe darnos razón de qué hizo con él o qué le mandó a hacer. Él era el capitán de instrucción, es decir, dio la orden del supuesto cambio con el que nunca volvimos a saber de mi hermano", expresó en la misma emisora.
Ante tales declaraciones, el propio Ejército Nacional lanzó un comunicado en el que expresó su lamento por la pérdida del padre de Quintero, pero a la vez se defendió de las acusaciones.
"No existe prueba alguna de la responsabilidad de los servidores públicos ni por acción ni por omisión por la presunta desaparición del señor Jaime Enrique Quintero Cano", sentenció un escrito que no cierra una herida muy profunda en la familia del jugador.