El club belga participaba en el MIC y tenía previsto viajar a Barcelona a las 9 de la mañana, un rato después de que se haya producido la explosión. De hecho, los chicos y sus acompañantes ya estaban en el aeropuerto, pero, por suerte, lejos de la zona de la explosión, por lo que no han tenido que lamentar.
Eso sí, el estado de pánico y emergencia en que ha entrado el aeropuerto al completo y gran parte de la ciudad de Bruselas ha dejado a alguno de los niños en estado de ansiedad y mucha preocupación, según ha relatado a 'Sport' Ángel Cortés, el coordinador del fútbol base del Kas Eupen.
"Por lo que he podido saber, hay chavales muy afectados por lo ocurrido. Nadie de la expedición ha resultado herida, pero han habido muchos nervios después de la explosión y ahora mismo no sabemos qué pasará", ha terminado de contar Cortés.