Tuvo que ser un error del portero lo que hizo que el empate dejase de estar vigente en el electrónico. A balón parado, tras un córner botado por Toko Ekambi, el guardameta de Guinea Bissau salió a por un balón que le superó ampliamente.
En el segundo palo esperaba Banana, que con un potente cabezazo pegado al palo izquierdo de la portería puso el primero de los dos tantos consecutivos que marcó Camerún en el partido.
No quedó ahí la cosa, pues apenas tres minutos después volvió a marcar la selección liderada por Seedorf desde el banquillo. En una jugada con suerte, el balón le acabó llegando, dos rebotes en defensas mediante, a Bahoken.
Sin oposición, el camerunés puso todavía más tranquilidad a su combinado nacional, dejando tocada a una Guinea Bissau que pudo recortar distancias cuatro minutos después de no ser por el palo.