"Diego ya ha dicho que quiere quedarse, nosotros que se quede, y hay una tercera parte importante porque tiene su propiedad. Ya hablamos con ellos y volveremos entre la semana que viene y la siguiente", afirmó el directivo.
En cuanto a Diego Reyes, no todo está tan seguro. Robert afirma que el Espanyol quiere que se quede, pero que tampoco hará locuras ni asumirá cosas que no puede asumir. El Espanyol tiene una opción de compra de siete millones de euros, una cifra elevada.
"Ahora estamos en una fase en la que el cuerpo técnico y el área deportiva están analizando perfiles, nombres de jugadores y necesidades de refuerzos. En unas semanas empezaremos el enfoque de la temporada que viene para no tener que correr en verano y desde el primer día de pretemporada tengamos a la mayoría de jugadores", explicó.