El Everton salió con ganas desde el principio, con un equipo muy bien ordeando y haciendo buena presión.
El primer susto para el Manchester City llegó pronto. Los 'toffees' tenían muy clara la estrategia: arrancar con Lukaku en cuanto hubiese oportunidad. Por muy poco el delantero estaba en fuera de juego y el gol no valió, pero los locales ya le ganaron la espalda por primera vez a la zaga de los de Guardiola. Sería la tónica del partido.
Lukaku, la pesadilla de los 'citizens'.
El Manchester City se estancó. A pesar de tener la posesión, le costaba conectar al centro del campo con el ataque. Zabaleta no generó suficiente juego en el medio y el equipo necesitaba más velocidad.
Los de Guardiola disfrutaron algunas ocasiones y Sterling tuvo la más clara: se quedó solo ante el portero, pero entre Joel y Baine se hicieron con el balón antes de que el atacante pudiese rematar.
Con el partido más o menos equilibrado, el Everton golpeó primero y todo salió tal y como Koeman lo tenía plaenado: en el minuto 34', Lukaku no perdona tras asistencia de Mirallas. Se llegó al descanso con el 1-0 en el marcador.
El Everton hunde al City en el segundo tiempo
La segunda parte empezó ya muy mal para los 'citizens'. En el 47', Mirallas puso el 2-0 y, sorprendentemente, el City se hundió con este gol. Si en el 1-0 Guardiola animaba a la remontada, con este tanto era la viva imagen de la desolación, hundido en el banquillo.
La cosa no cambiaría. El Everton sabía a lo que jugaba, se mostraba seguro esperando y el City no daba con la tecla. Guardiola reaccionó tarde cambiando a Zabaleta por Iheanacho, pero el City era un equipo sin ideas.
Así fueron pasando los minutos mientra los 'toffees', a pesar del esfuerzo físico, seguían implicados. No había forma de que el Manchester City, al que le faltaba algo, diese con la tecla ante un rival ordenado.
Fue entonces cuando llegó el tercer gol del Everton: una auténtica obra de arte del jovencísimo Davies (18). El jugador se dio el autopase de su vida y, cuando le devolvieron el balón, definió de forma magnífica picándola ante Claudio Bravo.
El partido, si ya estaba sentenciado con el 2-0, con el 3-0 se acabó. Lukaku aún lo intentó una vez más, pero fue el debutante Lookman el que puso la guinda y logró un debut de ensueño: en el primer balón que tocaba, completó la goleada entre las piernas de Claudio Bravo.
Dura derrota para Guardiola, que estuvo sin ideas, ahora que parecía que remendaba el rumbo del Manchester City.
En la próxima jornada, el Everton, séptimo en la tabla con 33 puntos, visitará al Crystal Palace. Por su parte, el City, quinto con 42 puntos, recibirá al Tottenham.