El jugador belga, pieza clave de su selección en la Eurocopa, tiene contrato hasta 2017 con la entidad rusa pero considera que su ciclo allí ha terminado, por lo que le pidió a la directiva que escuchara ofertas este verano.
Y la más suculenta la habría mandado el Everton, que busca un buen refuerzo para aumentar la solidez de su medular el próximo año. Ya habría llegado la primera oferta desde Goodison Park, aunque no ha trancendido el precio.
Lo que sí se sabe es que las negociaciones están muy avanzadas y que la llegada del centrocampista es casi un hecho. Su sueldo sería bastante alto, ya que rondaría los 130.000 euros.