Villas-Boas ha conseguido formar un grupo de futbolistas que ahora sí se entienden sobre el terreno de juego. Y eso se traduce en resultados. A diez puntos del PSG, el Marsella se postula como el único club capaz de tratar de discutir el trofeo a los parisinos.
Se ha convertido en un equipo fiable, sobre todo en casa. El Vélodrome no ve una derrota de los suyos desde el 10 de agosto, en la primera jornada de Liga frente al Stade de Reims (0-2).
Desde entonces, doce encuentros como local entre Liga y Copa que se han saldado con nueve victorias y dos empates. Un fortín que ha ayudado a una buena racha en el torneo doméstico.
14 partidos consecutivos sin perder en Ligue 1 (once triunfos y tres empates) para dejar atrás a Rennes y Lille de la pelea para ser el aspirante a pugnar por el título a final de campeonato.
Y parte de culpa la ha tenido Payet. El francés, ya a sus 32 años, ha marcado once tantos esta temporada en los 24 partidos que ha disputado. Con su mejor versión, llega también la del Marsella.