La segunda jornada de LaLiga arrancaba con el morbo de Iván Alejo recibiendo a su ex equipo en el Coliseum, pero Ángel se encargó de robarle el protagonismo ante los 'armeros'.
Arrancaron con ímpetu los locales, tratando de intimidar al conjunto de Mendilibar para alimentar las dudas que sembraron en la derrota ante el Huesca en Ipurua.
Exigidos por el guion, tanto Getafe como Eibar confiaban en estrenar sus casilleros para enderezar el rumbo tras no sumar puntos en la primera jornada de este nuevo curso.
Tras perdonar Pere Milla el regalo de Enrich, Ángel fusiló a Dmitrovic aprovechando una asistendia de Jaime Mata, desatando la euforia en las gradas del Coliseum.
Lejos de venirse abajo, el Eibar se lanzó a por el empate, invitando al Getafe a explotar la espalda de su defensa. No tardó el delantero canario en firmar el segundo tanto.
Sin embargo, el gol no subió al marcador. El colegiado sancionó fuera de juego, dando aire a un conjunto 'armero' que acarició el empate hasta que Djené se interpuso en su camino.
Espoleado desde el vestuario, el Eibar comenzó el segundo tiempo henchido de confianza, aferrándose a su competitividad para doblegar a un Getafe ávido de victoria.
Merced al paso de los minutos, el cuadro 'azulón' fue meciendo a su rival hasta desarmarle. Jorge Molina trazó una pared con Amath para fusilar a Dmitrovic y enviar a la lona al Eibar.