AZ Alkmaar y PSV se disputaban la victoria en un torneo Sub 12 en Holanda. El partido se tuvo que definir desde los once metros y en la muerte súbita.
Era el turno de chutar del AZ y, si fallaba, el trofeo se lo quedaba el PSV. El joven futbolista chutó y estrelló el balón en el larguero. Todo el PSV comenzó a celebrarlo.
Muchos pensaban que el balón había salido, pero no. Al caer, seguía dentro del campo, botó con un efecto raro y acabó entrando al fondo de la red. La tanda de penaltis continuó y al final fue el AZ el que levantó el título.
18 de agosto de 2019