El Girondins no estaba teniendo el partido esperado. El tanto de Jonathan Cafu fue igualado pasado la media hora de juego por Yamberé, pero dos minutos más tarde llegó Malcom para poner paz.
Se vio libre de marca, y cuando vio la portería a lo lejos, no se lo pensó. Armó la zurda y le soltó las costuras al balón, un zapatazo imparable para un Reynet que lo intentó, que saltó, pero que no llegó. Golazo para abrir boca.
BUT
— TOP LIGUE 1 Confo (@Romain_football) 1 de diciembre de 2017
QUEL BUUUUT ! Malcom mets une frappe magnifique.
Via @butsligue1 #DFCOFCGB pic.twitter.com/yD8BXp1v8M