No, lo de Milán ante el Hapoel Be'er Sheva, el modesto conjunto israelí que doblegó por 0-2 a los de Frank de Boer en la primera jornada de la Europa League, no fue una mala noche. Parece que al Inter no le esperan muchas alegrías y sí muchas decepciones esta temporada en Europa.
En Praga, ante un Sparta que estrenaba entrenador, no fueron rival para un equipo checo que mandó desde el principio. Concretamente, desde el minuto 7, en el que una pérdida de balón provocó una contra letal que terminó con Vaclac Kadlec anotando el primer tanto para los locales.
No sería la única vez que el internacional perforase la meta defendida por Handanovic. Concretamente, tardó poco más de un cuarto de hora en volver a hacerlo. Los futbolistas 'neroazzuri' esperaban un balón colgado y dejaron sólo en una banda al ariete, que recibió un pase rápido y encaró al meta esloveno, al que batió sin dificultad.
Kadlec estuvo cerca de lograr un 'hat trick' tras el paso por vestuarios, pero su disparo se fue lamiendo el larguero. El que sí acertó fue Rodrigo Palacio, que tras una pared con Éder colocó el balón en el fondo de las mallas. Pero Ranocchia vio la segunda amarilla y la falta que provocó fue botada por Mazuch y rematada por Holek, que sentenció el encuentro.
Cero puntos ha cosechado el Inter ante dos equipos, en teoría, muy inferiores. Ahora vienen dos partidos ante el Southampton en los que los de Frank de Boer deberían, por el escudo que representan, mejorar sus prestaciones. Aunque, visto lo visto, tanto hoy como hace dos semanas, las esperanzas son mínimas.