Las horas previas al anuncio del nuevo entrenador, transcurrieron en el Giuseppe Meazza con un partido intenso ante el colista. El Inter dominó el partido de cabo a rabo, llegó a sacar 18 córners, pero sufrió lo indecible para abrir el marcador.
El resultado es engañoso a medias. Refleja el dominio del Inter ante un Crotone sin muchas armas para hacer daño, pero no el trabajo que necesito el cuadro local para desnivelar la contienda.
No fue hasta los minutos finales cuando una asistencia maravillosa de Icardi permitió a Perisic plantarse en el área y hacer el primero. El 1-0 removió el partido de tal manera, que Icardi tuvo tiempo de hacer dos goles casi sin tiempo.
Uno de penalti y otro en el descuento para sumar dos más a su cuenta, reivindicarse y sentenciar el partido ante el colista.