La Primera División de Argentina tuvo históricamente dos denominadores comunes, el poder central de Buenos Aires y la obediencia de los clubes del interior. Julio Grondona, luego de ganarle la pulseada a Amadeo Nuccetelli tras la final del Nacional 1977, marcó un rumbo que hasta hoy parecía intacto.
Pasaron décadas para que las instituciones del interior del país comenzaran a trabajar en conjunto y a desarrollarse por fuera de los intereses de la capital. Para la salud del fútbol doméstico, este proceso está ocurriendo, y las demás provincias empiezan a generar valor propio e identidad.
Basta con observar los animadores de la tabla de posiciones para vislumbrar el aumento del protagonismo de escuadras 'no convencionales'. El principal conjunto que está desarrollando fuerza institucional, apoyo societario, generación de marca propia e infraestructura es Talleres de Córdoba, que sorprende al crecer tanto en tan poco tiempo. El 'matador' ocupa el segundo puesto en la Superliga, es ejemplo en la administración económica y aspira a consolidarse con la clasificación a Copa Libertadores.
Los clubes que han seguido el camino abierto por Talleres son Godoy Cruz de Mendoza (4º posición), Unión de Santa Fe (7° posición), Colón de Santa Fe (8° posición) y Belgrano de Córdoba (11° posición), quienes están localizados en zona de acceso a copas internacionales.
Las asociaciones deportivas que no transitan un destacado presente en la agenda liguera son Atlético Tucumán, Newell's Old Boys y Rosario Central, ya que están ubicados por debajo de la mitad de tabla.
Sin embargo, estos tres combinados representan al país en las dos competiciones continentales. Los tucumanos integran el Grupo C de la Copa Libertadores, mientras que los rosarinos están disputando la Copa Sudamericana.
Debido al avance de estos equipos dentro del fútbol nacional e internacional, es importante reconocer los diferentes trabajos realizados en cada uno de ellos. La postura del interior, frente al poder Buenos Aires, es necesaria para lograr la construcción de un fútbol más federal, desarrollado y profesional.