Según cuenta John Cross, periodista deportivo inglés, en el capítulo de 'Los Invencibles' de su libro titulado 'Arsène Wenger', así ocurrió la peculiar historia que terminó con Henry, Bergkamp y el propio técnico heridos y Kolo, fichado por el Arsenal.
"La pelota le cayó a Thierry Henry y Kolo Touré, de la nada, lo golpeó por detrás. Fue una entrada terrible, una de tarjeta roja en un juego normal, y nuestro mejor jugador estaba rodando en el campo.
"El entrenador estaba gritando: 'Kolo, ¿qué haces? No entres así'. Al minuto, la pelota le llegó a Dennis Bergkamp y Kolo hizo exactamente la mismo. Nosotros pensábamos: 'Estamos tratando de ganar la Premier y un chico que está a prueba está destrozando a nuestros mejores jugadores'. Se volvió a oír a Wenger gritarle: '¡No más entradas!'.
"Se reanudó el juego y, esta vez, Kolo hizo una gran entrada, la pelota estaba en el aire y cayó en el pie del míster. Él estaba en la cancha, viendo en el entrenamiento. La siguiente que pasó fue que Kolo le hizo una entrada con los dos pies a Wenger. Sólo escuchar a Wenger gritando. Tuvo que ir al servicio médico y el chico de la prueba había lesionado a Henry, Bergkamp y al entrenador.
"Kolo estaba llorando, su gran día se había arruinado. Fui al cuarto de los servicios médicos y ahí estaba Wenger, con hielo en su tobillo. Yo le dije: 'No creo que haya sido su intención'. Y entonces me dijo: 'Le fichamos mañana. Me gusta su intensidad'. Él sabía que podía sacar lo mejor de Kolo y se convirtió en un gran jugador para el club".
Así, cuando más lejos veía su sueño, el jugador formó parte de un equipo en el que encontró la estabilidad, llegando a superar los 300 partidos con los 'gunners'. El defensa ganó cinco títulos y logró 14 goles y su mejor nivel sobre un terreno de juego.
¿Moraleja? Dejarlo todo sobre el césped suele traer buenas noticias...
19 de marzo de 2016