No puede haber más emoción de cara al último encuentro del grupo. Los dos equipos europeos llegan a tope, tras haber mostrado músculo y con altas dosis de confianza. Sin embargo, quién tenga el mejor cruce podría ser una obra de ingeniería.
Por primera vez, el líder podría no ser el mejor, sino el más limpio en el terreno de juego. Por el momento, la diferencia es ligeramente a favor de los de Southgate, que han visto solo dos amarillas, por las tres de los belgas.
La situación podría ser surrealista, y dejar los equipos más pendientes de forzar amarillas o de no verlas antes que buscar la portería contraria.
Obviamente, el que se lleve los tres puntos coronará una gran primera fase. Sin embargo, a tenor de las particulares circunstancias que se dan el encuentro, se vivirá con mucha intensidad.
Ahora mismo, ambos equipos suman ocho goles a favor por dos en contra después de la goleada de los ingleses frente a Panamá, la más importante en lo que llevamos de campeonato hasta el momento.