Sólo la mediación del propio futbolista evitó que cruzase el Canal de la Mancha, pues presionó para que su club aceptase las condiciones del Barcelona.
Aulas y Bartomeu negociaron personalmente, de presidente a presidente, el traspaso. Umtiti presionó para que el Lyon aceptase la oferta azulgrana, y si no lo hubiera hecho, no le hubieramos visto jugar en España.
Porque las ofertas que comenzó a escuchar el Lyon eran superiores económicamente a la del Barça, pero la decisión del jugador tuvo un peso importante.
Según cuenta 'Mundo Deportivo', Jean-Michel Aulas, presidente del Lyon, llamó personalmente a Bartomeu para confirmarle que aceptaban.
El presidente del club galo confesó que lo hacía porque se lo pidió Umtiti, que su oferta no era la mejor y que le costaría una invitación para la final de la Champions, si llegaban, claro. Y una comida. Bartomeu aceptó estas 'condiciones'.
El propio jugador, cuando se enteró, quiso agradecérselo personalmente a Aulas, confesándole que le había permitido cumplir un sueño.