La última vez que vistió de 'rossonero' fue hace justo dos años, pero actualmente parece que el Milan queda ya muy lejos para Kevin-Prince Boateng, ese hombre que parecía que se comería el mundo en Italia pero que, a causa de sus polémicas extradeportivas no llegó a aprovechar su máximo potencial.
Formado en la cantera del Hertha de Berlín, el ghanés llegó a pasar por Tottenham, Borussia y Portsmouth antes de aterrizar en Milán. En la ciudad italiana dejó ver su mejor versión, sobre todo en las temporadas 11-12 y 12-13. Apuntaba muy alto, pero todo lo bueno que hacía en el campo, lo malograba fuera de él.
El Milan le dejó salir al Schalke 04, pero tras año y medio y nueva polémica, regresó media temporada a la entidad 'rossonera'. En verano de 2016 dejó definitivamente el club que le puso en el mapa del fútbol internacional y comenzó un tour que le hizo pasar por España (Las Palmas) y Alemania (Eintracht Frankfurt) antes de volver a Italia (Sassuolo).
Ahora, en su vuelta al país transalpino está dejando ver su mejor nivel. Cuando el Schalke 04 prescindió de sus servicios y regresó a Milan cabizbajo, cambió el chip y durante las dos últimas temporadas llegó a centrarse para mejorar y hacer aflorar su versión más letal... y lo ha logrado.
Actualmente vive un momento incluso mejor que el que vivió en el Milan. Sus registros en los primeros seis partidos ligueros son impresionantes (cuatro goles), teniendo en cuenta que su temporada más prolífera de cara a puerta fue la de Las Palmas, cuando hizo 10 en 29 choques.
Kevin-Prince ya no extraña el pasado porque su presente está al mismo nivel, pero es especial volver a verse las caras contra el equipo que sacó lo mejor de sí mismo... por primera vez.