La directiva del club 'rossonero' considera que la plantilla debe de conseguir grandes refuerzos este verano y la llegada del centrocampista inglés sería uno de los máximos objetivos para el club transalpino.
El futuro es bastante incierto para el jugador británico, ya que, al finalizar su cesión hablará con Wenger para saber cuál es su situación de cara al futuro y, en caso de no asegurarle minutos, pedirá la rescisión de su contrato.
"Por supuesto que me encanta el Arsenal, pero si llega un momento en el que tengo que irme, entonces me iré. Es difícil para mí, por supuesto, me encanta el Arsenal. He tenido grandes momentos ahí y todavía puedo verme jugando, pero quén sabe lo que pasará en el futuro", aseguró en unas declaraciones recientes.
Aún, ni el propio jugador sabe qué decisión tomará en unos meses... pero lo que está bien claro es que el Milan seguirá bien de cerca sus pasos.