Hay un hombre clave, silencioso, acertado, preciso e importante en el esquema del Nápoles. Su nombre es Giovanni di Lorenzo, es de los favoritos de Gennaro Gattuso y, partiendo desde el lateral derecho, se las ha apañado para ser imprescindible en su equipo. BeSoccer Pro traza los porqués estadísticos.
El primero está en lo distributivo. El italiano es el depurador de su escuadra. El 12,7% de los pases clave (13) del conjunto son suyos, como el 10,8% (1.247) de los correctos y el 10,8% (1.426) de los intentados. Es el líder en todos estos aspectos. SIn él en el campo, el estilo del plantel se vería comprometido.
¿Por qué? Porque dejar que la pelota fluya por sus botas implica acierto, continuidad y peligro. El defensa tiende a jugar cerca de Fabián y Politano, expertos en hacer que una posesión pase de la zona de tres cuartos de campo a convertirse en una opción clara de gol.
Pero, teniendo en cuenta el aporte de Di Lorenzo en pases claves, antes mencionado, asistencias (lleva cuatro), y centros (con 54, acumula el 13,5% de todos los que genera el equipo como el tercero que más factura) ni siquiera depende de sus compañeros especialistas para poner en apuros a los rivales. Cuando puede servir cueros envenenados, lo hace sin dudar, sobre todo desde su carril.
Segunda clave estadística que le hace trascendental en el Nápoles: es el segundo que más recupera balones (84 recuperaciones, el 9,1% del total como segundo exponente) por delante de Koulibaly (80 recuperaciones, 8,7% del total), que frecuenta las agendas más nobles de Europa, y solo superado por Manolas (88 recuperaciones, 9,5% del total).
¿Qué quiere decir esto? Que su zona de actuación en el campo no es solo una lanzadera de balones limpios, peligrosos y precisos, sino que es una trampa para sus rivales. Sin ser imposible superarle, sí que se antoja complicado hacerle daño a los 'azzurri' desde la banda izquierda si él está de guardia.
Todo este compendio estadístico, tanto en la perspectiva ofensiva como en la defensiva, adquiere más importancia si se tiene en cuenta con quién comparte vestuario Di Lorenzo. Tanto liderazgo en lo distributivo junto a efectivos de la talla de Fabián, Insigne o Politano y un buen nivel defensivo con Koulibaly o Bakayoko cerca evidencian que, desde la sombra, un futbolista también puede ser pilar de un equipo.