El NAC-Heracles fue el partido de los españoles. Manu García se salió con un golazo que ha revolucionado Holanda, pero Angeliño, canterano del Dépor fichado por el City hace un lustro no se quedó atrás.
De sus botas salió el balón que Vloet convirtió en el primer gol del partido, a los cuatro minutos de juego, pero lo mejor estaba por llegar.
Le dieron un pase alto, el clásico cambio de banda que lleva llovido, con nieve, como se dice. Y Angeliño no se puso nervioso. ¿Por qué controlarlo a la vieja usanza cuando te puedes gustar haciendo un control de esos que le gustan hacer a Neymar?
7 de febrero de 2018