Posiblemente sea uno de los fallos más extraños vistos nunca. Mezcla entre relajación, prisa y torpeza. Ehizibue, del PEC Zwolle, perdonó ante el Feyenoord una ocasión que recordará para toda su vida.
Posiblemente sea uno de los fallos más extraños vistos nunca. Mezcla entre relajación, prisa y torpeza. Ehizibue, del PEC Zwolle, perdonó ante el Feyenoord una ocasión que recordará para toda su vida.