Esta es una de las historias de Arsène Wenger menos recordadas y con más ‘fair play’ de por medio. Aunque el Arsenal consiguió llevarse la victoria en aquel partido de FA Cup ante el Sheffield United, uno de los goles ‘gunners’ generó gran polémica: el 2-1 de Marc Overmars, con un jugador rival lesionado. No obstante, Wenger pidió la repetición del partido.
Era el 13 de febrero de 1999. El Arsenal, campeón de las últimas dos ediciones, jugaba en Highbury ante el Sheffield. Un partido corriente de FA Cup, o eso pensaban los espectadores que acudieron ese día al feudo ‘gunner’. El típico partido en el que un equipo grande se mide a otro de una categoría menor en el torneo más antiguo del mundo.
Patrick Vieira adelantó al Arsenal con un gol de cabeza tras una falta botada en el lateral del campo, pero el delantero Marcelo empató para el Sheffield. También anotó de cabeza el jugador brasileño, para darle emoción al encuentro. Ondeaba el 1-1 en el marcador, cuando se produjo el hecho que marcó el partido.
El portero del United despejó un balón que el Arsenal sacaría de banda. Los locales iban a volver a poner el balón en juego cuando Lee Morris cayó lesionado en el campo. El ‘gunner’ Ray Parlour mandó el saque lateral hacia la línea de fondo, en señal de devolver el balón al Sheffield, cuando Kanu perdió el hilo de la situación.
El nigeriano, que debutaba ese día en Highbury, prosiguió la jugada continuando hacia el área enemiga. Cedió el balón para Overmars, que de forma instintiva empujó a las mallas el segundo gol del Arsenal. Los jugadores del Sheffield prácticamente se comieron al árbitro, diciendo que habían encajado gol de una forma claramente antideportiva.
Steve Bruce, entrenador del Sheffield United, hizo un claro gesto a sus jugadores, en el que se interpretaba un ‘vámonos de aquí’. Los visitantes se pasaron unos minutos en el vestuario, por lo que el Arsenal ganaría por descalificación de su rival. Pero Wenger no quiso que su equipo se clasificase así.
El entrenador francés le ofreció a Bruce repetir el partido diez días después, y el técnico del Sheffield aceptó. Wenger lo hizo público en rueda de prensa ante los medios de comunicación. La FA dictaminó que el encuentro se repetiría tras el controvertido y polémico tanto de Overmars que clasificaba al Arsenal.
“Aceptamos que se repitiera el partido porque los jugadores, que creo que tendrían que ser tan aplaudidos como Wenger, no querían ese resultado. No querían clasificarse de esa forma” dijo Steve Bruce posteriormente, que asimismo agradeció el gesto al técnico galo y al directivo David Dein, que también tuvo un importante papel.
El ‘replay’ se disputó el 23 de febrero en Highbury, y el Arsenal se clasificó para cuartos de final ganando otra vez 2-1. Curiosamente Overmars volvió a marcar (este sí fue un gol deportivo), y Lee Morris, quien se había lesionado antes de que el holandés marcas en el primer partido, hizo el tanto del Sheffield. Pero el aplaudido gesto de Arsène Wenger con sus rivales ya había dado la vuelta al mundo.