Se puede decir que el de este curso es el equipo más completo que ha tenido a su disposición Simeone. Con el mejor Griezmann, Diego Costa entonado y los grandes fichajes del verano, la temporada se presentaba inmejorable, pero el comienzo ha dejado bastante que desear.
La victoria en la Supercopa de Europa ante el eterno rival, el Real Madrid de Lopetegui, puso la moral por las nubes a los rojiblancos, pero el inicio de la Liga se ha encargado de bajarla. Una victoria, un empate y una derrota en tres partidos. Sólo cuatro de nueve puntos posibles... y saldo de goles negativo.
Es esto último lo que más preocupa a la afición rojiblanca. Aunque la Liga acaba de comenzar, el equipo de Simeone ha dejado muestras de fragilidad, y eso es algo poco común en la considerada mejor plantilla a nivel defensivo de la competición española.
El Atlético ha recibido más goles (3) de los que ha marcado (2). Su diferencia de tantos es negativa (-1) y nunca, desde que llegó el Cholo, se había llegado a la tercera jornada con menos goles anotados que recibidos.
Sus números contrastan con los de Real Madrid (diferencia de +8) y Barcelona (+10). Los dos grandes comenzaron la temporada con potencia y sin dudas, por lo que el Atlético no debe esperar mucho más para dar ese salto que le coloque a la retaguardia de ambos. El choque de este sábado contra el Eibar en el Wanda Metropolitano deberá de ser el punto de inflexión para volver a la senda de la victoria.