Ocurrió durante el verano de 2017. El futbolista egipcio, ya en las filas del PAOK, fue cedido al Feirense portugués. La operación siguió los cauces habituales y Warda, de 23 años por aquel entonces, fue presentado por su nuevo club.
Sin embargo, tres días después de su presentación, Warda se volvió a Grecia. No hubo una explicación oficial por parte del Feirense. Ni una noticia en su web, nada. La prensa lusa comenzó a indagar y pronto dio con la clave.
El diario 'Record', el 12 de agosto de 2017, destapó la polémica. Aseguraba que Amr Warda podía haber sido despedido por haber "importunado a las mujeres de dos compañeros".
Teniendo en cuenta que Warda fue presentado el 8 de agosto de 2017, podemos decir que el egipcio tardó un tiempo récord en meterse en problemas.
El citado medio asegura que todo ocurrió al término del primer entrenamiento realizado con su nuevo equipo. Su actitud con las esposas de dos de sus compañeros sorprendió a todos, y fue apartado de inmediato del grupo.
Nunca más volvería a entrenarse con la plantilla del primer equipo. Y fue devuelto al PAOK. De los 1,25 millones de euros que se dice que le costó al Feirense la cesión nunca se supo. Parece que no aprendió la lección.