En concreto, según 'Liverpool Echo', hasta el presidente de la entidad, Bill Kenwright, se habría puesto a mediar entre los abogados del club y el agente del jugador para tratar de conseguir al jugador.
Ahora mismo, el jugador, pretendido por varios clubes europeos, es considerado como una de las perlas del fútbol belga, razón por la que toda la cúpula 'toffee' estaría tradando de convencerle.