Haciendo el bueno el refrán que dice "no hay peor ciego que el que no quiere ver", resulta difícil escapar del mensaje que Nasser Al-Khelaïfi ha mandado el mundo entero con respecto a sus dos grandes estrellas, Neymar y Mbappé. Una conexión que está cada vez más cerca de separarse, con el brasileño como candidato número a abandonar el Parque de los Príncipes dos años después de su llegada.
En 'France Football', el catarí abrió la caja de los truenos con frases contundentes, pero con las que no era fácil discernir el destinatario exacto. "Los jugadores deberán asumir sus responsabilidades, incluso más que antes. Debe ser completamente diferente. Tendrán que hacer más, trabajar más. No están para complacerse. Y si no están de acuerdo, las puertas están abiertas. ¡Ciao! Ya no quiero tener ningún comportamiento de estrellas", señaló.
Las habladurías se multiplicaron y, horas después, el mismo medio amplió una entrevista que verá la luz este martes. En dos partes diferenciadas, cada una con un protagonista distinto. Para empezar, uno de los titulares que la revista lleva a su portada, la cual dio de lo que hablar al instante: "Mbappé continuará al 200%". Un mensaje claro para el Madrid, que disfruta desde su atalaya del cisma parisino.
Al-Khelaïfi añadió que no va a dejar salir "a un jugador increíble" y que ya ha hablado con el jugador para aclarar cualquier duda sobre lo que está por venir: "Le expliqué que las responsabilidades no se piden, que hay que ir a buscarlas. No se espera, se provoca. Es listo y estoy seguro de que lo habrá entendido". Quieren que Mbappé sea el líder, pero también que se lo gane con sus propios méritos.
El otro lado de la balanza lo representa Neymar, inmerso en un carrusel de lesiones y polémicas que han empequeñecido una carrera llamada al máximo exponente. Apenas dos años suma en el PSG, que pagó 222 millones, pero en París ya parecen hartos de él. "Por supuesto, los contratos deben respetarse, pero la prioridad es la adhesión total al proyecto. Nadie le ha obligado a firmar aquí. Nadie le ha empujado", sentenció Al-Khelaïfi.
Claramente, el PSG abre una puerta de par en par a Neymar, cerrando a cal y canto a su vez la de Mbappé. Es el turno de las quinielas en torno al brasileño, al que no le importaría regresar a un Barcelona que tenía -y tiene- a Griezmann encarrilado. El Madrid espera también su turno, consciente de que quizá esta oportunidad sea única para llevar a 'Ney' al Bernabéu.