El PSG perdió la oportunidad de ser cabeza de serie en el sorteo de los dieciseisavos de final de la Champions League al empatar un partido que, a priori, parecía fácil para el cuadro parisino.
Desde el comienzo del choque, el conjunto francés se complicaba el partido, puesto que Misidzhan, a los 15 minutos, adelantaba al equipo búlgara y ponía al estadio Parque de los Príncipes patas arriba.
El esquema y la filosofía de Emery siguen sin calar en el vestuario parisino, que continúa anhelando a Ibrahimovic y a Laurent Blanc.
Tras la reanudación, Cavani firmó uno de los goles de la temporada, y después de un mal rechace de la defensa búlgara, el delantero uruguayo anotó de chilena el empate.
El PSG se volcó en el ataque buscando la remontada, pero de nuevo, jarro de agua fría en París: Wanderson firmaba el 1-2, después de una buena asistencia de Cafu.
Emery tuvo que tirar de banquillo, y sacó a Kurzawa, Jesé y Aurier. Ya en el descuento, Di María anotó el tanto del empate a dos, aunque no sirviese para mucho. De este modo, el PSG le regala el liderato al Arsenal de Wenger, que venció por 1-4 al Basilea.